El arte urbano condimenta el famoso mercado Majané Yehuda de Jerusalén
Por ABIGAIL KLEIN LEICHMAN
Versión en español: Fanny Díaz
Artistas de calle usaron las distintas superficies del mercado al aire libre de Jerusalén para plasmar Tábula Rasa, un ecléctico proyecto de arte urbano.
La próxima vez que camines por el mercado Majané Yehuda de Jerusalén notarás mucho más que las mercancías, olores y sonidos del comercio de este dinámico shuk*. Ahora los recipientes de la basura, las paredes de piedra y las superficies de concreto muestran una variedad de trabajos artísticos.
El artista de calle Itamar Paloge fue escogido como curador de este proyecto, titulado Tábula Rasa, patrocinado por la municipalidad. “Anteriormente formé parte de proyectos para ‘colorear’ zonas descuidadas de la ciudad. Esta vez voy a guiarlo”, dijo el artista a Israel21c. “Mi meta es que las calles sean coloridas, que se sientan vivas y además estén llenas de arte”.
Paloge reclutó treinta participantes de las escuelas de arte y fotografía Bezalel, Hadassah y Musrara de Jerusalén, así como conocidos artistas locales, escultores, fotógrafos, artistas gráficos y artistas de calle.
Varios vendedores también se unieron a la diversión, robando algunos momentos creativos al pregón de las diversas mercancías del shuk (vegetales, carne, queso, pescado, especias, artículos judaicos y ropa étnica, entre tantos otros).
“[Tábula Rasa] es una aventura conjunta entre la Unión de Estudiantes y la municipalidad”, explicó a los reporteros y visitantes el alcalde de Jerusalén, Nir Barkat, mientras disfrutaba del trabajo de los artistas en la sección iraquí del bullicioso bazar.
El alcalde incluso colaboró en la decoración de un tablero de backgammon utilizado por algunos asiduos para relajarse en amistosa competencia. Y también ayudó al artista de origen canadiense Yehuda Braun a pintar con spray una sección de su gigantesco mapa del mercado.
“Disfruto trabajar con la gente, hacer el arte accesible a personas que usualmente no van a galerías”, dice Braun, cuyo mapa será exhibido permanentemente en un área del mercado.
Otra joven artista de calle, Alina Goldberg, decoró las casetas de electricidad con curiosos dibujos de gente con cabezas de vegetales. Junto con su colega Roni Bussani, la artista realizó también el grabado “Cabeza de coliflor” en una de las paredes exteriores del mercado.
Goldberg concibió la idea de estas obras mientras vivía en la Ciudad Vieja de Jerusalén, y en broma tomó fotos de su compañera de piso sosteniendo vegetales en la cabeza. Viendo las fotos, tuvo una revelación visual: “Algunos de los vendedores del shuk realmente se parecen a los vegetales que venden”, dice con una sonrisa.
Paloge dice que Tábula Rasa no es una decoración efímera. “Todo lo que se está creando aquí es permanente. Va a durar, siempre y cuando las calles mismas sigan aquí”, dice.
El mercado es una alegría
Esto probablemente será un tiempo muy largo, si la historia es una indicación del futuro. Majané Yehuda (literalmente, el Campamento de Judá), el mercado al aire libre más grande y activo de Israel, se ancla en el barrio del mismo nombre fundado en 1887 por un gerente de banco, un trabajador del metal y un empleado ferroviario. Este último escogió el nombre en memoria de su hermano Yehuda, que había fallecido recientemente. El mercado se inauguró en 1928 y pronto se convirtió en un imán para locales y turistas debido a sus precios y variedad, y también por la experiencia misma de su animado ambiente al aire libre.
El alcalde Nir Barkat se prepara para participar en la pintura de un tablero de backgammon / Fotografía: Abigail Klein Leichman
“Majané Yehuda —dice Barkat— es parte del espacio público de la ciudad, un lugar único, y a la gente le encanta venir aquí”. Cualquier día de la semana, uno puede encontrar a judíos y árabes regateando hombro a hombro en las abarrotadas callejuelas, algunas de las cuales están cubiertas con toldos para protegerse del sol y la lluvia.
En años recientes, el venerable pero un tanto deteriorado mercado ha visto aparecer tiendas de moda y cafés entre sus tradicionales puestos de venta. Las baldosas han comenzado a reemplazar los gastados y desiguales adoquines. El nuevo tren ligero de Jerusalén tiene una parada a un lado del shuk, el cual se extiende varias cuadras a la redonda, mientras que al otro lado diversas líneas de autobuses completan el servicio.
Durante el mes de julio, los lunes por la noche el Festival Balabasta llena de vida los callejones del shuk con una ecléctica mezcla de esculturas efímeras, juglares, payasos, capoeira y danzas, mientras la música de las bandas resuena en el empedrado y los tejados.
Barkat dice que la nueva iniciativa de arte urbano “añade entusiasmo a los cambios que están ocurriendo aquí”, y se refiere al renovado mercado como “una alegría”.
* Shuk: mercado al aire libre en hebreo y árabe.
Fuente: ISRAEL21C.ORG